Macroconcierto de la MTV

San Fernando baila al son latino

Miles de personas se conjuran para disfrutar, para reír, mover las caderas y olvidar por unas horas. Romper fronteras y estar en comunión con los del otro lado del Atlántico. La música como fórmula para construir puentes. Con esa intención se montó en la localidad  de San Fernando un fastuoso escenario bajo el manto de La Pepa 2012 y la bendición de la cadena musical MTV.

Desde poco antes de las siete de la tarde del sábado eran unas pocas cientos de personas las que acudían al recinto habilitado para disfrutar de música gratis. El dominicano Vicente García, apadrinado por Juan Luis Guerra, fue el encargado de empezar a calentar el personal con no más de cuatro temas de su último y único trabajo en el mercado.

A los primeros compases de salsa, le siguió el rock de Efecto Mariposa y los cientos de asistentes se fueron multiplicando para alcanzar los miles. Ya era de noche y se iba entrando en calor. Al escenario de subía uno de los más esperados, con su inconfundible sombrero. Con más año, pero con las mismas ganas de gustar. Los más maduros recordaban su Bachata rosa con un alo de nostalgia y los más jóvenes se dejaban llevar. Merengue y olor a café. Juan Luis Guerra y 4.40 intentaron convencer a La Isla que los años no pasan.

Pero las ya casi 35.000 almas que se agolpaban esperaban al deseado. El que, efectivamente, intenta hacer un pacto con aquel Don Diablo y que hizo gritar a las miles de gargantas que le esperaban sólo a él. "¡Guapo!, ¡Papito!, ¡Cántame al oído!..." Poco importaba quién era esa 'Pepa' y para qué había ido. El que sí estaba era Miguel, Bosé, y las caderas, las suyas y las de los demás, comenzaron a moverse y ya fue no parar.

Esbozó algunos de los temas de su último trabajo, 'Cardio', pero lo que esperaban sus fans es que llegara Como un lobo y que les susurrara Morena mía. Bosé lo sabía y realizó un repaso a su trayectoria musical. El respetable estaba encantado, entusiasmado y feliz en una noche para la música, para estrechar lazos con Iberoamérica. Fue el propio Bosé el que les recordó que aquello era más que un concierto, debía ser una declaración de intenciones, de unión con los pueblos hermanos y de valorar la libertad que hoy se disfruta gracias a que 200 años atrás otros murieron y lucharon por ella.

Pueblos hermanos como el portorriqueño en la persona de Calle 13, que fueron los encargados de cerrar con su último trabajo, 'Entren los que quieran', un espectáculo musical que comenzaba casi seis horas antes. Rap caliente para irse contentos a casa.